Un ‘Spoiler‘ es un mensaje o noticia que anticipa el final de una película, libro u obra la cual nos tenía a la expectativa, un evento que estábamos esperando con tanta ilusión y de repente a alguien se le da por dañarnos la sorpresa contándonos el final de dicho trama sin ni siquiera haberles pedido que nos contaran; que tal personaje se muere, que este otro se recupera, que tal situación era para que sucediera lo otro. Toda esa información de más es un spoiler y al recibirla nos destruye la capacidad de sorprendernos, cosa que no pasaría si no nos hubiesen contando nada.
Lanzamientos cinematográficos como la película “Vengadores, Endgame” o series de talla internacional como “Juego de tronos” en su octava y última temporada, están expuestas a bombardeos de spoilers tanto en los medios masivos de comunicación, con sus muchos Memes, como en los comentarios sueltos en medio de un comedor o corredor de universidad. Y si por cosas del destino llega a nuestros oídos dicha información no requerida, nos arruinaría la sorpresa e incluso podría hasta hacernos perder el interés de acercarnos a ver lo que era electrizante y ahora solo sería corriente y predecible.
En el círculo religioso también existen spoilers. Lo que Jesús estuvo ‘anunciando’, cual spoiler, durante el viaje a Jerusalén sobre su llegada a la gloria de la resurrección pasando primero por el dolor de la cruz, se ha cumplido. El evangelista Juan (20, 19-31) una vez da fe del cumplimiento de aquel anuncio, lanza otro spoiler pero esta vez no sobre el destino de Jesús, sino sobre nuestro propio futuro: “Estas apariciones han sido escritas para que ustedes crean que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y creyendo, tengan Vida en su Nombre.” A diferencia de los spoilers que arruinan las series televisivas o novelas de literatura universal, estos en los evangelios no nos opacan lo asombroso del acontecimiento anunciado, sino que nos alimentan la esperanza y motivan el ánimo para seguir luchando. El hecho de sabernos salvos, tenidos en cuenta, con vida eterna, que vamos a resucitar a pesar de las dificultades que estemos pasando, no nos desencantan sino que más bien nos fortalece para mantenernos firmes en la lucha.
Como cristianos, seguidores de aquel crucificado y resucitado, debemos esforzarnos por no olvidar que todos nuestros sufrimientos en cruz son llevaderos siempre y cuando nos auxiliemos en la fuerza que procede de Jesús y su promesa de resucitarnos. Este spoiler no daña nuestra historia de salvación sino que más bien la impulsa a su cumplimiento, porque a nosotros los creyentes no nos importa tanto un final ‘inesperado’, sino cómo llegar a él.
