Ante la crisis social y pública que durante varios meses se recrudeció en nuestro país, fueron los jóvenes quienes nutrieron con su fuerza y presencia en las calles de Colombia los ideales de protesta que se venían fraguando desde varios sectores de la nación. Precisamente ante este fenómeno, nuestros jóvenes del Movimiento Juvenil Dominicano quisieron tomar la vocería para conversar sobre estos asuntos y tener en cuenta los dolores, sufrimientos y quejas de los ciudadanos hermanos tanto de la fuerza pública como del pueblo civil.
Este conversatorio se dio el jueves 6 de mayo, a las 8:30 pm., cuando algunos representantes del Movimiento Juvenil Dominicano reunieron gran parte de los jóvenes que comparten la espiritualidad de los predicadores, con el fin de escuchar voces implicadas, discutir desde la fuerza que imprime el Evangelio y también desde las situaciones concretas que deben ser siempre comprendidas e iluminadas.
Desde el inicio los jóvenes quisieron contar con la compañía e intervención de otros miembros de la Familia Dominicana que enriquecieran el debate. Por esta razón se dio la participación de: fr. Jhony Ochoa, O.P., desde el Catatumbo; fr. Julián Herrera Porras, O.P., fraile estudiante de segundo año de filosofía; Hna. Lina María Quintero, dominica de la presentación desde Medellín; Kora Calderón, estudiante de Ciencias políticas e integrante de la comunidad Metanoia de Bogotá; y Jefferson Castrillón, miembro de la policía nacional y de la comunidad juvenil Lacordaire.
La metodología del conversatorio fue dirigida por uno de nuestros jóvenes dominicos y aspirante a la Orden de los frailes predicadores, Alejandro Carmona Ábalo, quien quiso llevar el hilo de la discusión inspirado en la Carta Encíclica del Papa Francisco “Fratelli Tutti” y a partir de algunas tesis o statements con respecto a las cuales los invitados debían argumentar su posición. Las tesis fueron:
- La participación de la Iglesia en tiempos de crisis debe ser neutral, no se debe tomar posición al respecto.
- La defensa de los Derechos Humanos es una tarea central de los cristianos, en tanto nuestra fe se basa en los principios evangélicos de la vida de Jesús.
- La tarea de los jóvenes dominicos en los contextos de injusticia es la de tejer puentes de hermandad y reconciliación entre las partes y llevar un mensaje de paz a las sociedades.
En todas las respuestas pudo evidenciarse ideas comunes que, por tener como base el Evangelio, giraron en torno a la importancia del llamado a la paz mediante el diálogo sincero y real que hace la Iglesia a todos los sectores implicados en esta crisis nacional, salvaguardando siempre la dignidad humana, la libertad y la justicia social integral que evite el recrudecimiento de las desigualdades políticas, económicas y sociales.
Como cierre del conversatorio se dio lugar a un momento de oración frente al Santísimo Sacramento, expuesto desde el Convento Santo Domingo de Bogotá, ante el cual se puso el sufrimiento de tantas familias y el dolor de la partida de quienes han sido víctimas de estos meses difíciles de caos e incertidumbre. Con la bendición final, se manifestó la certeza de que es Dios quien debe orientar nuestras acciones y palabras, y será Él quien continúe guardando a los más pequeños de nuestra nación ante el poder desmedido y soberbio de los hombres.
Así pues, nos sentimos orgullosos del bien que pueden hacer nuestros jóvenes dominicos con su palabra de esperanza al mejor estilo de nuestro padre Santo Domingo de Guzmán; con su tenacidad y decisión por ser canales de paz y diálogo en esta sociedad, tal como lo inspira el Evangelio y lo propone la Iglesia de Colombia.