“Quien no deja padre y madre, no es digno” de ser discípulos de Cristo. Bajo esta premisa, Fr. Adalmiro recuerda que inició su formación al presbiterado hace 50 años, aniversario que estuvo marcado por varias celebraciones religiosas, homenajes y conmemoraciones que se desarrollaron desde el 28 de noviembre hasta el 08 de diciembre del 2021, fecha de su ordenación ministerial.
Fr. José Edelmiro Arias Agudelo, conocido cariñosamente por Padre Adalmiro, nace el 07 marzo de 1941 en Neira, Caldas, en el matrimonio conformado por Don Félix Arias y Margarita Agudelo y una familia de 11 hermanos. Su ingreso a la Orden de Predicadores se da gracias al padre Jesús María Nieto, quien, en una corta entrevista, interroga al joven estudiante del Colegio Instituto Neira preguntándole si quería ser dominico. Es así como al año siguiente ingresa al Colegio Jordán de Sajonia a cursar quinto y sexto de bachillerato.
Toma hábito el 7 de diciembre de 1963 en la parroquia de Chiquinquirá en compañía de 18 jóvenes. Tenía el Padre Adalmiro 20 años cuando en aquel tiempo la cédula de ciudadanía se otorgaba a los 21 años de edad, pero con derecho a usar no pantalón corto sino largo. Esta es una mirada de 59 años de esta vida dominica.
El pasado 28 de noviembre, en su natal Neira, se llevó a cabo la primera celebración Eucarística en conmemoración de sus bodas de oro sacerdotales. Sumado a esto, la alcaldía y el concejo municipal otorgaron al padre Adalmiro la máxima condecoración como “Personaje Ilustre”, resaltando sus competencias de atletismo y futbol, su compañerismo, su trabajo a favor de los pobres y su participación en la Sociedad de San Vicente de Paúl del pueblo.
En el Centro Cultural y de Convenciones del Teatro Los Fundadores, de Manizales, Fray Adalmiro fue condecorado con la “La Gran Medalla Orden de la Paz”, por parte de la Fundación Orden de la Paz, de Málaga: “Por concurrir en él las virtudes, cualidades y circunstancias de vida, y aportación a la cultura de la paz en general. Así como por sus importantes responsabilidades cumplidas y la seguridad de que transmitirá sus grandes valores allá donde vaya y acorde con sus actuaciones que siempre estarán impregnadas de las características propias de un Hombre de Paz”, señala el documento de reconocimiento.
También fue homenajeado con la imposición de “La Gran Medalla Estrella de la Solidaridad”, otorgada por la Fundación Escenarios de Vida de Manizales, haciendo alusión a su importante papel en la fundación de la Facultad de Comunicación Social para la Paz en la Universidad Santo Tomás de Bogotá y su trabajo en la parroquia de El Señor del Monte de Galilea ubicada al sur de Bogotá, un sector que en aquellos años vivía en un ambiente de vulnerabilidad, sin presencia de la Iglesia ni del gobierno de la ciudad.
Cerrando el ciclo de homenajes, el día de su aniversario se realizó un acto religioso en el Templo del Convento Santo Domingo que contó con la participación de hermanos de comunidad, familia, amigos y un gran número de estudiantes del Colegio Jordán de Sajonia.
La Provincia de San Luis Bertrán de Colombia expresa unas sinceras felicitaciones al Padre Adalmiro exaltando su experiencia y testimonio de vida sacerdotal como ejemplo para las futuras generaciones aspirantes a la vida religiosa.
